Veto, insistencia y festejó en la Marcha Federal Universitaria

Histórico momento vivieron los ciudadanos autoconvocados para defender la Universidad Pública y la Emergencia Pediátrica en diferentes rincones del país, este miércoles 17 de septiembre.

Como respuesta a un reclamo del personal del Hospital Garrahan, se proyectó en agosto junto al financiamiento para las universidades públicas, dos leyes que vienen a responder sobre una emergencia económica que viven los distintos sectores de la sociedad, en este caso el de dos sectores sensibles para la sociedad.

Estas leyes impulsadas por la oposición tenían el objetivo de garantizar el financiamiento y condiciones dignas de trabajo. En agosto fue votada y aprobada por el Congreso de la Nación, pero posteriormente fue vetada por el ejecutivo. Es decir después de todo un proceso político y administrativo de consulta donde los diferentes representantes ciudadanos, Diputados y Senadores, se pusieron de acuerdo, el presidente de la nación Javier Milei decidió vetar ambas leyes.

Según lo enmarca en nuestra Constitución Nacional Argentina en el Art 83 luego de un veto de una ley, la misma vuelve a ser observada en la cámara donde se originó dicha ley, para  insistir en su aprobación.

Ante este panorama, los ciudadanos se autoconvocaron en distintos puntos del país para acompañar la sesión de diputados, dónde se definiría el rumbo y futuro de muchas vidas de argentinas y argentinos. Este encuentro por una causa común se llamó Marcha Federal Universitaria, qué es la tercera que se registra desde que asumió el presidente Javier Milei.

Con el acompañamiento de cientos de miles de personas, la sesión de diputados dejó un claro mensaje: 174 votos afirmativos ratificaron la Ley de Financiamiento Universitario frente a tan solo 67 en contra. Además se revirtió el veto presidencial de la Ley de Emergencia Pediátrica para el Hospital Garrahan con 181 votos a favor y 60 en contra.

Hay que resaltar que la ley de financiamiento universitario y la ley de emergencia pediátrica buscan recomponer los salarios, garantizar un presupuesto adecuado, asegurar becas y residencias médicas, y recuperar la inversión en investigación que en ambos casos beneficia a cada uno de los sectores y a la sociedad en general.

La alegría y los festejos en las calles argentinas, de quiénes fueron a bancar estas políticas públicas, se hizo sentir. Es una esperanza en cada casa donde crece una ilusión de llegar a una universidad pública y/o tener garantizada la salud de las infancias.

¿Sabés por qué? Porque el argentino sabe lo que es defender con pasión aquello en lo que cree. Y aunque estos tiempos estén revueltos, hay cosas que no entran en discusión, ni en una grieta; y esas cosas son las que estuvieron, están y estarán bien, garantizando el futuro de este país con educación pública, laica y gratuita y la salud para nuestros niños y niñas.