El Paramillo: Un colectivo escolar quedó varado y debió ser tirado por un tractor

Para algunos transportistas escolares que viajan diariamente en la ruralidad más profunda y olvidada de Lavalle para cumplir con la entrada o salida de alumnos de escuelas distritales, cada jornada es una odisea laboral expuesta a las condiciones impropias de los caminos de tierra o empedrados que adolecen de cuidados periódicos por parte de las autoridades.

El viernes, en El Paramillo, un interno de la empresa Prestaciones S.A., con niños abordo, quedó empantanado en la calle y debió ser socorrido por un productor rural quién amablemente sacó de tiro el colectivo con su tractor y así lograr continuar el viaje a destino. Se trata de alumnos de la Escuela 1-512  José Andrés Díaz que vivenciaron la situación sin inmutarse, pues se trata de un hecho común lidiar con las malas condiciones del camino.

Un posteo en las redes de la propia institución relataba "Una aventura está mañana, cuidando a los chicos que viajaban el colectivo que quedó enterrado. Gracias al vecino que nos auxilio, y así pudimos llegar a la escuela" dejó plasmado lo que las autoridades con jurisdicción en el mantenimiento de caminos rurales deconocen o disimulan con otras obras de mayor envergadura.

De acuerdo a comentarios y fotos de los propios vecinos de la escuela, en la mañana de este lunes, máquinas viales despejaron el barro y compactaron la calle. Sin embargo, dicen que las tareas no son la solución definitiva y, por el contrario, aducen que los trabajos realizados profundizaron el nivel de la calle varios centímetros por lo que ante otra inclemencia climática "se convertirá en una pileta" dijeron.

Es innegable que Lavalle necesita mejorar su red de caminos rurales y no puede ceñirse a enripiados, bacheos o compactaciones en pequeños tramos. El entramado vial requiere de un plan integral de asfaltado, luminarias, obras de artes y garitas que priorice zonas y comunidades en el mediano y largo plazo y que, en la medida de su avance, garantice la accesibilidad a centros de salud, escuelas, instituciones de la sociedad civil. En definitiva, atienda el problema de fondo ya que cada traza es parte de la columna vertebral del desarrollo productivo y social del departamento. 

Mientras la DGE intenta rediseñar el modelo aúlico para lograr mejores rendimientos escolares, siguen pendientes las decisiones, presupuestos y firmas necesarias para avanzar con proyectos integrales que permitan ofrecer mejores condiciones intra y extramuros. No basta con un plan de reacondicionamientos de edificios sino se incluyen mejorar sustanciales en los accesos a instituciones educativas en zonas rurales que garanticen la asistencia de los alumnos, ya que forma parte de la calidad y - principalmente - seguridad educativa.